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Casos resueltos por la grafística forense
El caso Weinberger es el primer artículo de una serie que presentará los entresijos de distintos casos criminales en los que la clave para su resolución fue la grafística forense. Sin duda, numerosos casos delictivos, ya sean delitos violentos o no, se resuelven cada día por medio del análisis de la escritura. Todos los cuerpos policiales del mundo cuentan con un departamento de grafística. El secuestro del bebé Weinberger fue resuelto por el FBI en el año 1956.
La gravedad del secuestro Weinberger
El secuestro del bebé de un mes de edad, Peter Weinberger en su casa localizada en los suburbios de Long Island en Nueva York el 4 de julio de 1956, puso en pie a la sociedad americana a nivel nacional. P.Weinberger no era el retoño de una típica acomodada familia, de la que por alguna razón sería más esperable una situación así, era el recién nacido de una familia de clase media residente en los suburbios de Nueva York, nadie esperaba que esta clase de familia pudiera ser objetivo de actos criminales. La seguridad de la sociedad americana se puso en entredicho, la gente bloqueaba las puertas de sus casas, el temor se apoderó de los ciudadanos americanos durante aquella noche.
Fue tal la repercusión de este caso, que forzó la legislación de una nueva ley firmada por Eisenhower: el periodo de espera establecido hasta que el FBI pudiera entrar en acción se reducía de 7 días a 24 horas, pudiendo ser menor a 24h si se sospecha que el secuestrador pudiera cometer abusos sexuales.
Los hechos
El secuestro ocurrió de manera rápida y fácil el 4 de julio de 1956, Betty Weinberger se encontraba en el porche de la casa junto al pequeño Peter. Betty – la madre – después de arroparlo entró en casa durante unos minutos mientras el bebé dormía. Cuando Betty volvió al patio lo que encontró fue el carrito de bebé vacío y una nota manuscrita dentro de él. En la nota, el secuestrador se disculpaba, añadía que necesitaba dinero y pidió 2000$ a cambio del bebé. El secuestrador también escribió que el bebé sería devuelto al día siguiente si su demanda quedaba satisfecha, también amenazó con matar al bebé al primer paso en falso. A pesar de la amenaza explícita, Betty contactó con la policía del condado de Nassau.
El error
Morris Weinberger – el padre – pidió a los medios de comunicación que no dieran parte de la noticia en sus periódicos y canales de TV. Todos cumplieron sus peticiones excepto el New York Daily News. Al día siguiente una multitud de periodistas y reporteros ocupaba el lugar que el secuestrador había fijado para que se realizara la entrega del dinero. La policía procedió con su estrategia de dejar un falso paquete pero el secuestrador no apareció.
Segundo intento de cobro del rescate
El 10 de julio – 6 días después – el secuestrador llama a la familia Weinberger dando instrucciones para el pago del rescate frustrado anteriormente, sin embargo, él no se dejó ver en dicha ubicación. A pesar del supuesto fracaso al no aparecer el sospechoso, la policía encontró en el lugar una bolsa de tela azul junto a un bordillo en cuyo interior había una segunda nota manuscrita diciendo a los padres dónde podrían encontrar al pequeño Peter, en caso de que todo fuera bien. Esta segunda nota manuscrita que surge en el caso, fue examinada por los expertos en análisis de documentos, concluyeron que el autor de ambas notas era la misma persona.
El caso pasa al FBI
El 11 de julio, después de los 7 días de espera necesaria por ley, el FBI toma las riendas del caso. Edward Curran toma el mando. Su primer paso fue posicionar su equipo de investigadores en un lugar cercano al barrio de Westbury, en dónde se perpetuó el secuestro. El FBI se estableció en Mineola, un barrio limítrofe con Westbury (ver mapa más abajo). La única prueba de la que se disponía hasta ese momento eran las dos notas manuscritas. Expertos en análisis de escrituras del FBI viajaron de Washington DC a Nueva York. Las notas de escritura fueron entregadas a un grupo de agentes recién formados en grafística, tenían la ardua tarea de comparar las notas del secuestrador con los archivos de muestras de escrituras de la Oficina Estatal de Vehículos Motorizados de NY, oficinas estatales y federales de libertad condicional y varios municipios.
Después de 2 millones de muestras descartadas, la búsqueda llegó a su fin el 22 de agosto de 1956 – dos meses y medio después del secuestro – se encontraron características coincidentes con la escritura de Angelo LaMarca.
LaMarca había sido detenido por el departamento de delitos económicos, debido al contrabando de alcohol y su escritura quedó registrada en la documentación de dicha causa.
Datos del secuestrador
Angelo LaMarca era un taxista y camionero que vivía con su mujer y dos hijos en Plainview, Nueva York. Vivían en una casa que LaMarca no podía permitirse, tenían muchas facturas pendientes de pago y estaba presionado por un agente de la recaudación. El 4 de julio se encontraba conduciendo por el distrito de Westbury, en busca de una solución a la desesperada que solucionara sus apuros económicos. El secuestro fue espontáneo y no premeditado, LaMarca se encontraba en la calle dónde residían los Weinberger, observó que la madre entraba en la casa dejando al bebé en el porche, en ese momento LaMarca escribió rápidamente la nota de rescate que dejaría en el carrito después de haber cogido al pequeño Peter.
Confiesa
El 23 de agosto de 1956 Angelo LaMarca fue detenido en su casa por el FBI y la policía del condado de Nassau. Aunque en un principio negó cualquier implicación en el caso, posteriormente confesó al ver las pruebas de escritura que poseía el FBI contra él.
LaMarca declaró que acudió al lugar en el que citó por primera vez a la familia Weinberger para que le pagarán el rescate, pero al ver a los medios y a la policía en el lugar se fue de allí con el bebé dentro de su coche. Condujo alejándose del lugar con miedo por el cariz que había tomado el asunto y confesó haber dejado al bebé vivo en una zona de densa vegetación cercana a una salida de la autopista, para luego conducir hasta su casa esperando que todo pasara.
Una rápida búsqueda en la zona descrita por LaMarca confirmó el peor de los resultados, hallaron los restos descompuestos del pequeño Peter Weinberger de un mes de edad.
Angelo LaMarca, al no haber traspasado fronteras estatales en su secuestro, fue entregado y juzgado por las autoridades del Condado de Nassau. El 14 de diciembre de 1956 fue condenado a muerte por los cargos de asesinato y secuestro. Finalmente fue ejecutado el 7 de agosto de 1958 en la prisión de Sing Sing.
ANEXO FOTOGRÁFICO DEL CASO WEINBERGER:
